Estalla el verano y seguro no has parado de leer sobre la necesidad de cuidar tu piel del sol.
Y si hay un lugar donde no queremos manchas, ni marcas, de ningún tipo, es en nuestro rostro ¿Cómo evitarlo? ¿Tenemos que tener un cuidado especial si nuestra piel tiene acné?A continuación te lo contamos.
A todas nos gusta lucir una piel bronceada, lo cierto es que no hace falta ir a la playa, en horarios extremos, para que las marcas de sol aparezcan. De hecho, puedes dar un pase por la calle y verás como tu piel se va bronceando.
La exposición solar es continua, y nuestra piel tiene memoria.
¿Por qué salen marcas?
Cada año la radiación solar incide en nuestra piel y hace que aumente la producción de melanina, pigmento de la piel encargado de bloquear los rayos ultravioleta. Por eso, cuando esto ocurre, la piel se oscurece y se torna más morena. En el caso de las personas con acné, es habitual que, con el tiempo, aparezcan marcas y cicatrices, que son mucho más sensibles al sol que el resto de la piel. Por lo que a la hora de exponerse a los rayos solares es imprescindible extremar las precauciones.
Para poder evitar cualquier tipo de marcas, lo primero es añadir en tu rutina de cuidado la aplicación de protección solar, pero esto no es solo en verano sino cada día.
“Aplica protector solar todos los días del año”.
Ten en cuenta que el principal factor de envejecimiento prematuro es la exposición solar. Por lo que, además de protegerte de las marcas, será tu gran aliado antiage.
¿Cuál es el protector más adecuado si tengo piel grasa?
No todos te valen. Ten en cuenta que si aplicas un protector demasiado graso, provocarás más exceso de sebo y te sacará más granitos.
¿Cómo seleccionarlo?
Para elegir el protector primero debes fijarte que sirva contra los rayos UVA, los UVB y los IR. Los UVB causan dolor cuando hay una sobreexposición, pero en el caso de los UVA, son los más peligrosos, ya que, pese a no provocar dolor, son los responsables del envejecimiento, manchas y melanoma, entre otros trastornos.
A la hora de comprar el protector solar debes leer muy bien su composición.
El factor de protección debe ser 50. Lo ideal es oil free, esto quiere decir que no contenga grasa y “no comedogénico, es decir que no favorezca la aparición de imperfecciones o comedones. Tampoco debe contener perfumes, ni un exceso de alcohol, ya que esto propiciará que se fijen más las marcas de acné.
Es importante que su textura sea ligera y fluida. Que su tacto sea seco, sebo regulador y matificante, para evitar los brillos.
Nuestra recomendación es la fórmula XA25 Antiseb, además de ser pantalla total ante el sol, ayuda a absorber el exceso de grasa y secar comedones y granitos.
Una vez que hayas localizado el protector solar más adecuado para ti, no pienses que ahora tienes piedra libre para exponerte al sol porque “seca los granitos”.
Esto es totalmente falso. Si bien el sol provoca la deshidratación de la piel, incluso en pieles grasas (que como sabes, son más propensas al acné). Cuando te expones al sol de forma excesiva, las glándulas sebáceas (que producen el sebo, aportando a la piel los aceites que necesita) producirán en exceso sebo – seborrea- y ello traerá por consecuencia la formación de más granos.
De hecho la exposición al sol está totalmente contraindicada en el tratamiento de acné severo, ya que empeora el aspecto de las marcas de acné.
Así que mucho cuidado, evita la exposición directa, sobre todo en las horas más peligrosas (entre las 11 y las 16pm). Y media hora antes de exponerte, aplícate la crema solar para darle tiempo a absorberse y asentarse en tu piel.
¿Existen tratamientos para poder disimular o eliminar las marcas del acné?
¡Claro que sí! Aunque este tipo de tratamientos se aplican en los meses de otoño-invierno, cuando la exposición al sol es mínima. Lo mejor es que nos consultes para definir cuál es el más adecuado para ti.
Ya estás preparada para evitar las marcas del sol en tu piel ¡A disfrutar del verano!
